- El Congreso, en su rol legislativo, tiene la responsabilidad de sancionar las leyes que enmarcan la vida democrática de un país.
. Ahora, para preocupación de muchos, no todo lo que aprueban diputados y senadores podría tener legitimidad.
. Ha quedado demostrado que no toda ley avala la razón y con la reciente sanción de la relacionada a los medios audiovisuales quedó tela para cortar.
. La urgencia y premura maratónica que demostró el Ejecutivo en promulgarla deja puertas abiertas para el escándalo.
. Era necesaria una ley de la democracia para regular a las radios y a la televisión. Esto no está en discusión.
. Lo que entra en el intercambio de opiniones es la manera y la forma con que el gobierno argentino actuó en particular.
. Que la autoridad de aplicación quede en manos del oficialismo de turno, de éste y de los sucesivos gobiernos, es llamativo, porque es tan peligroso un monopolio privado como otro público.
. Una tesina dice que el presente es inasible. Es el momento del entrecruzamiento entre el pasado y futuro, entre aquello que fue y lo que será.
Instantaneidad
. Existen denuncias periodísticas de legisladores que mutaron por acuerdos financieros tras aprietes políticos.
. Vendrán juicios millonarios, en un país donde muchas veces la lentitud burocrática de la justicia deja el sinsabor de injusticia. Gane o pierda quien sea.
. Pero vivir del presente, sin mirar un poco al futuro, puede tener sus consecuencias, y cuando los que ejecutan o legislan se equivocan, las “macanas” las paga el pueblo.
. La velocidad corre el velo de la razón, quita la oportunidad de ver con claridad.
. El Senado, como cámara revisora, no tocó ni una coma del proyecto previamente aprobado por Diputados. Había errores, pero el gobierno impuso su voluntad.
. El desmembrar a uno o a tres grupos empresarios periodísticos no pudo o no debió ser objetivo de revanchismo, porque la política tiene que transitar por los caminos del bien mayoritario, no de intereses sectoriales como a los que estamos acostumbrados.
Complicidad
. También es cierto que hemos escuchado reclamos de derechos adquiridos por parte de grupos privados que se cansaron de presionar y violar leyes -en los últimos años- en complicidad de intereses propios y políticos.
. Una ley no puede esconder la realidad, lo que se refleja mediante hechos históricos.
. La ley de convertibilidad no sirvió para frenar la crisis del 2001, el aplauso a la cesación de pago de la deuda externa costó caro, como el déficit que genera la nueva estatización de la aerolínea de bandera, entre algunos simples ejemplos.
. Ya tenemos una nueva ley de medios, la que debió ser discutida meticulosamente y sancionada por consenso. Faltaron pasos de importancia y las consecuencias pueden ser peores que los beneficios políticos transitorios.