Los campos del partido de 25 de Mayo sumaron unos importantes 700 milímetros
en los últimos tres meses, lo que a criterio de algunos especialistas serán
beneficiosos para las cosechas de la temporada 2012/2013.
‘La Niña’ consiste en una aceleración de los vientos ecuatoriales (alisios) que provoca un enfriamiento del Océano Pacífico del Ecuador, fuertes lluvias en India, China, Australia y el sur de África y sequías en Argentina, Uruguay y el sur de Brasil.
Estas abundantes lluvias son provocadas por el fenómeno ‘El Niño’, lo
que debería ayudar a las cada vez más flacas arcas de la economía de Argentina (ver nota),
paradójicamente uno de los mayores exportadores mundiales de alimentos.
La buena próxima cosecha llegaría luego de una parcialmente decepcionante
producción en la temporada agrícola 2011/12, debido principalmente a la escasez
de precipitaciones provocada hasta inicios de enero por el ciclo de ‘La Niña’ (contracara
de ‘El Niño’) y cuyo rigor hizo estragos en las plantaciones de primera
instancia.
Cosecha en el sur de 25 de Mayo |
‘La Niña’ consiste en una aceleración de los vientos ecuatoriales (alisios) que provoca un enfriamiento del Océano Pacífico del Ecuador, fuertes lluvias en India, China, Australia y el sur de África y sequías en Argentina, Uruguay y el sur de Brasil.
Proyecciones marcan que desde comienzos de este siglo hay una oscilación
climática de tres años, que encadena dos fenómenos ‘La Niña’ con uno ‘El Niño’,
un patrón que se mantendría en los próximos años y provocaría fuertes lluvias a
partir de octubre del 2012 en la pampa húmeda.
En la campaña actual los cultivos argentinos fueron muy golpeados por ‘La
Niña’, aunque las lluvias que tuvieron lugar desde mitad de enero permitieron
evitar una merma de rendimientos mayor.
Estimación y advertencia
Las estimaciones iniciales para el maíz -que al estar en el período de
floración fue el grano más golpeado por la sequía- de hasta 30 millones de
toneladas cayeron hasta un nivel de entre 20,5 y 22 millones, mientras que las
de la soja bajaron de 53 millones de toneladas a entre 43,5 y 45 millones,
según datos oficiales.
Pese a que los agricultores ya superaron el riesgo de la sequía, los
especialistas advierten que ahora pueden ser golpeados por intensas heladas estacionales, poco antes del inicio de la etapa de llenado de
grano de la soja.
Los lotes de soja sembrados de forma temprana, entre octubre y
noviembre, fueron muy perjudicados por la falta de lluvias, pero los de
implantación tardía están en un excelente estado.