El dirigente veinticinqueño Mario Ravettino, presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC), remarcó su prepocupación por el estado de crisis aguda que atraviesa el sector exportador.
La crítica estuvo en línea con la opinión del Secretario General de la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne y sus Derivados, José Fantini.
En tal sentido, ambos manifestaron que se reducen de manera permanente los planteles de operarios ante la baja de actividad y cierre de las plantas frigoríficas exportadoras, estimando que este proceso continuará si permanecen las condiciones en que se desarrolla el negocio argentino por estos días.
Mediante un comunicado de prensa, expresaron que el gobierno nacional debe entender e interpretar esta difícil situación, y colaborar en la instrumentación de un sistema de producción y comercialización que permita la subsistencia de este clave sector industrial del país.
El reclamo se conoció previo a que Argentina y la Unión Europea firmaran en Bruselas un acuerdo para incrementar las exportaciones de carne bovina de alta calidad en 1.500 toneladas, que se suma al cupo de 28.000 toneladas previstas.
En nombre de sus representadas, ambos dirigentes informaron que están tratando de ser escuchados por el gobierno, en el convencimiento que la magnitud de las crisis se incrementarán en los próximos meses de no mediar alguna asistencia en lo inmediato.
Las exportaciones cárnicas se han reducido sensiblemente en los últimos tiempos y resulta inviable mantener operativas a plantas frigoríficas preparadas con requisitos para abastecer el mercado internacional, con una capacidad ociosa que supera el 40 por ciento de su actividad normal.
En tal sentido, ambos manifestaron que se reducen de manera permanente los planteles de operarios ante la baja de actividad y cierre de las plantas frigoríficas exportadoras, estimando que este proceso continuará si permanecen las condiciones en que se desarrolla el negocio argentino por estos días.
Mediante un comunicado de prensa, expresaron que el gobierno nacional debe entender e interpretar esta difícil situación, y colaborar en la instrumentación de un sistema de producción y comercialización que permita la subsistencia de este clave sector industrial del país.
El reclamo se conoció previo a que Argentina y la Unión Europea firmaran en Bruselas un acuerdo para incrementar las exportaciones de carne bovina de alta calidad en 1.500 toneladas, que se suma al cupo de 28.000 toneladas previstas.
En nombre de sus representadas, ambos dirigentes informaron que están tratando de ser escuchados por el gobierno, en el convencimiento que la magnitud de las crisis se incrementarán en los próximos meses de no mediar alguna asistencia en lo inmediato.
Las exportaciones cárnicas se han reducido sensiblemente en los últimos tiempos y resulta inviable mantener operativas a plantas frigoríficas preparadas con requisitos para abastecer el mercado internacional, con una capacidad ociosa que supera el 40 por ciento de su actividad normal.
