. Las consecuencias serán múltiples en los países desarrollados y, por arrastre, las implicancias se profundizarán en los emergentes como Argentina (tapa).
. Falta tiempo

. En particular, nuestro país aumentará paulatinamente en prestar especial atención a las tensiones que generan el tipo de cambio, las subidas parciales de precios internos, la falta de crédito, los recortes laborales y el derrumbe de valores en las materias primas.
. Las cadenas de hecatombes bursátiles diarias no sabe de fronteras y por ello la plaza local arrastra una seguidilla histórica de derrumbes, una realidad complicada aún más por un sorprendente e imprevisto proyecto de ley para estatizar las carteras en poder de las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP).
. Las reacciones inversoras no se hacen esperar, pese a la incredulidad de algunos sectores, y la incertidumbre crece al ritmo de las sospechas de una urgente necesidad de financiación que el gobierno argentino debe afrontar para desarrollar sus ilimitadas ambiciones políticas.