- Por Marcelo Destefano
Simples datos, a modo de colaboración, que nos hacen recordar aspectos de nuestras vidas:
... Se busca estar cerca a todo lo inherente a 25 de Mayo, uno valora más a su ciudad cuando está tanto tiempo afuera, soy observador y detallista de los cambios que se van produciendo.
... Cuando voy a ver fútbol a la ciudad, siento interiormente emoción en un 90 por ciento de las veces, mil cosas que me vienen a la mente.
... En la pileta de natación de Sportivo están los mismos bancos de hace 25 años.
... Increible pero cierto, algunas de las gradas del viejo corso están en la cancha de Plaza España, en el sitio visitante, y otra en la cancha de papy de Argentinos.
... Al famoso palco azul que armaban para las fiestas en el centro de la ciudad, donde hablaba el intendente de turno, le he perdido el rastro hace dos daños. La última vez fue en la entrega de premios del memorial ciclístico Facundo Micheli. Dónde estará?
... Me acuerdo que cuando era chico trataba de subirme de todas maneras a ese palco cuando había corso, luego que lo lograba miraba desde ese lugar junto al jurado del carnaval. Cosas de pibes.
... En la cancha miro la cara de la gente de mi ciudad cuando se juega el partido. Por favor, como sufren !!!. Vi la reciente final entre Valdés y Plaza España, donde Abel Gallegos, y varios más, gritaban y sufrían, ideal para una foto.
... El aplauso sin gritar para alentar al equipo favorito, aplauso que no supera los dos minutos. Valdés entró a la cancha con parte de la hinchada y posaron todos juntos, en su mayoría niños y mujeres.
... Y lo más lindo, el folklore del fútbol del interior, el típico grito al árbitro de un partido: "sacate el corpiño de los ojos", por lo que cobra para bronca de muchos.
NdeR: Marcelo, gracias, valoramos tu material y la foto remitida de la céntrica Plaza Mitre.
