Economía
La voluminosa masa de agua que tiene en jaque al sur santafesino y al norte bonaerense tiene en alerta a productores cerealeros de 25 de Mayo, en un verano atípico con tormentas y lluvias.Las cuentas de ríos y arroyos crecieron abruptamente, hasta con poblados perjudicados.
Por ellos se presta atención a lo que sucede con los lechos del Salado, del Gato, del Vallimanca y del Saladillo en la región.
Paradójicamente, el territorio veinticinqueño se encuentra en el medio de dos fenómenos bien diferentes, por a las inundaciones indicadas se agregan graves sequías en el sur de la provincia.
La problemática genérica ya está manifiesta.
Por ello, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) recortó su estimación de la cosecha de soja 2016/17 en el país a 52,9 millones de toneladas, desde los 54,4 millones anteriores, debido a las condiciones climáticas extremas que causaron pérdidas de superficie en distintas zonas agrícolas.
Severos excesos hídricos en la región agrícola núcleo central y una sequía en el sur de Buenos Aires -el principal distrito rural de Argentina- provocaron una reducción de cerca de 1 millón de hectáreas, a 18,6 millones de hectáreas, en la superficie sembrada con soja.
Por cuestiones de beneficios impositivos y precios internacionales, algunos productores rurales cambiaron esta temporada la siembra de soja por la de trigo, dando también espacio a maíz y girasol.