- Por Ariel J. Pasquette
. ¿Por qué admiro a Maradona?
. Porque le dicen Dios. Porque vivió su vida al máximo. Porque se esforzó para ser un buen profesional. Porque puso el pecho en las paradas más difíciles; nunca se achicó.
. Porque con su carrera repartió felicidad. Porque llevó dignidad donde no la había. Porque dijo «aquí estoy» siempre que se lo necesitó. Porque sólo un verdadero héroe puede haber llevado una vida como la suya.
. Porque priorizó siempre a los otros por sobre él mismo. Porque nunca le gustó hablar de él, ni que hablaran de él. Cuando querían premiarlo preguntaba: «¿Por qué?». No encontraba razón para que lo homenajearan, cuando su propia existencia fue un homenaje a la vida.
. Porque sus años transcurrieron con marcada moderación y austeridad. Porque eligió vivir entre los humildes (en uno de los lugares más pobres del país) por propia decisión, cuando pudo haberlo hecho entre los acomodados.
. Porque corrió riesgos para acercar salvación. Porque cuando el tren de la vida lo llamaba a subir, él prefirió quedarse a servir a los que lo necesitaban.
. Porque es un prócer argentino contemporáneo. Porque admiro su coraje. Porque me gustaría que mis hijos imitaran alguna de sus virtudes.
. Sí, mi ídolo es Esteban Laureano Maradona, el «Doctorcito Dios» de indígenas y criollos de la selva formoseña.
# Biografia del Dr. Esteban Maradona (1895-1995)